Por: Jose Manuel Herrera Brito

La grandeza humana ha estado vinculada desde siempre con las características de cooperación y solidaridad, por buscar el bien personal y colectivo, deseando siempre el bienestar de los demás, por actuar en el devenir de la vida de manera coherente, valorando la empatía, identificándola plenamente, así como en relación con el respeto y la generosidad que la llevan a interactuar significativamente valorando igualmente a los demás y mostrando una horizontalidad en el trato sin establecer discriminaciones sino un aprecio positivo a todos; de ahí que bien pueda decirse que se reconoce la grandeza en los valores, historia, honestidad, autenticidad, pensar, sentir y actuar, lo que permite aumenta las capacidades para lograr transformaciones a través del saber compartir con un espíritu de co-creación, proponer y hacer innovaciones que reflejen capacidad creativa.

En atención a lo dicho, lo que debe sernos un válido rumbo, es claro que no podemos en contexto de desarrollo, crecimiento e integral avance en todas las áreas que posibles sean, seguir siendo una isla ni amurallarnos ante lo que real y verdaderamente requerimos como ciudad y departamento y menos en temas tales como seguridad, educación, salud, productividad y competitividad. En tal itinerario concierne al Distrito y el departamento fortalecer posibilidades y probabilidades con coordinaciones de plena representatividad ciudadana, políticamente responsable y de eficacia técnica para generar superiores incidencias y mejores resultados para alcanzar avances sustantivos en percepción de solidos desarrollos.

Interesan constructos permanentes, abordar con decisión e integralmente los principales problemas que acusamos con la constancia debida, en referencia a encaminarnos a las soluciones mejores. Insistir en lo social, con programas a este tenor que respondan en manera importante a las propias realidades, necesidades, y demandas poblacionales. estar dispuestos a movilizar conceptos de apertura. Ser sensibles a nuestros problemas, aplicar toda la experiencia posible en tal dirección, anticipar coordinaciones y colaboraciones con la participación activa de la ciudadanía, todo lo cual en la búsqueda y procura del muchas veces ausente bien común, con el objetivo de profundizar en buenos resultados.

En tratándose de consolidar avances mayores y mejores en todo sentido, surge la necesidad imperiosa de entender y comprender que se impone fortalecer nuestro cuerpo social, trabajar en equipo con solidez manifiesta, enriquecido todo lo cual con suficiente promoción de acciones, operaciones, ejercicios y renovados liderazgos, preocupados y ocupados ellos de potenciar social e integralmente ciudad, municipios y departamento, lo que llama y obliga del corto al largo plazo reacciones inmediatas, planeaciones, planificaciones, prospectivas y estrategias acordes con nuestras necesidades, las cuales soporten nuestro porvenir en condiciones ventajosas respecto de los más de los beneficios y aprovechamientos colectivos.

Es en definitiva centrar la atención en lo importante, esencial, sustancial, fundamental, Superar las afectaciones. Abrirnos a las oportunidades. Llamarnos a acercamientos, escuchas, entendimientos y consensos. Asumirnos como territorios en capacidad de alcanzar y materializar progresos mayores, en lo que ayuda mostrar, mostrarnos, demostrar y demostrarnos de que estamos hechos en lo atinente a ser competentes respecto de sabernos con suficiencia en cuanto a potenciarnos como unidades territoriales. saramara7@gmail.com