Por: Hernando Manuel Manjarres Altahona*
Muchas cosas se vienen al pensamiento cuando se habla de Teófilo Antonio Gutiérrez Roncancio; inteligencia al jugar el fútbol, rebelde, técnica y ganador entre otros aspectos; el mejor jugador de América en el año 2014, mundialista, campeón de la copa Libertadores, de la liga mexicana, argentina, de la copa turca y del rentado nacional entre otros pergaminos.
Más allá de lo deportivo es un hombre rebelde, polémico, sin pelos en la lengua, muchas veces mal educado en sus palabras y en los últimos días fue noticia por sus declaraciones contra Miguel Ángel Borja, integrante de la Selección Colombia eliminada, ocurrió en el partido Cali Vs Junior en el estadio Palma Seca, algo claro en los códigos del fútbol es, que lo que se hable en la cancha se queda en la cancha.
Muchos críticos de Teo consideran que él salió de la Chinita (un barrio con bastante vulnerabilidad al sur de Barranquilla) pero la Chinita no salió de él; innumerables escándalos en el fútbol nacional y extranjero invaden la carrera de Teófilo Gutiérrez; desde riñas con los compañeros hasta el porte de armas de fuego en un camerino.
Lo cierto es, que con 36 años ya anunció su retiro del fútbol, un tipo deportivamente ganador, con un palmarés como pocos, de una técnica excelsa, pero de un comportamiento bastante reprochable. Hoy en día el jugador antes de serlo, debe ser persona, debe ser ese ejemplo de miles de jugadores que lo admiran e imitan.
*Hernando Manuel Manjarres Comunicador Social – Periodista. Especializado en Gerencia Social. Magister en Comunicación, Desarrollo y Cambio Social. hernando.manjarres@gmail.com
