Por: Julián Martín Ruíz Frutos*

Lo equitativo nos lleva sin duda a un mundo mejor, es asunto trascendente y definitorio para el porvenir de los pueblos, y está entendida como el acceso en igualdad de condiciones a todo aquello a lo que se tiene derecho, conforme a normas universales de justicia social, que se abre paso como principio y de manera creciente en la conciencia de la humanidad, necesitada de un crecimiento económico que garantice el acceso equitativo a sus frutos y a un desarrollo social adecuado y resultados de progreso.

Requeridos estamos de un liderazgo con poder transformador que podamos usar para construir un porvenir mayormente sustentable y equitativo para todos, con diversidad de posturas en la toma de viables decisiones y soluciones, en la que ayuden aportes, ideas, iniciativas, innovaciones, contribuciones, visibilidad de experiencias, empatías, mejoras en resultados financieros, desarrollo de programas de envergadura, mejores rendimientos, estrategias de sostenibilidad, mejor forma de hacer las cosas y demás otras significaciones que inspiren compromisos y de contera comprometernos cada día con lo que debe movernos socialmente en beneficio colectivo, que nos lleve a poder capitalizar fortalezas y experiencias para generar un mundo mejor, en dirección a materializar propósitos de vida que resulten y sean acciones de reales cambios.

No podemos perder de vista que estamos en un mundo donde los desafíos medioambientales y sociales son cada vez más apremiantes, de ahí la necesidad de liderazgos que ofrezcan perspectivas ciertas desde las cuales poder demostrar que es posible dirigir comunidades de manera exitosa, además de promover responsabilidad social y sostenibilidad; de ahí la importancia que todos y cada uno de nosotros asumamos más acciones de liderazgo , lo mismo que contribuir con nuestros talentos y habilidades para construir un mejor porvenir, en la certeza que tenemos la responsabilidad y oportunidad de colaborar en la solución de los grandes problemas de nuestra era, lo que impone unir nuestras fuerzas, aprovechando nuestros talentos y dirigiéndolos hacia la empatía, la innovación y la resiliencia, para de esta manera impulsar iniciativas que promuevan la sostenibilidad y la justicia.

La invitación es invitar e invitarnos a apoyarnos mutuamente, compartir nuestros conocimientos y experiencias, al igual que trabajar mancomunadamente para desarrollar soluciones creativas y efectivas que beneficien a nuestras comunidades, y ser conscientes que nuestro liderazgo tiene que contener como ingrediente un poder transformador; más por cuanto es hora qué lo usemos para construir un futuro más sustentable y equitativo para todos.

*Abogado. Columnista . Especializado en Derecho laboral