Por: Andrea V. Caro Martínez*
Dos docentes e investigadores de la Universidad de Cartagena realizan un análisis crítico de la novela La maraca embrujada por jibaná de Manuel Zapata Olivella, reviviendo su legado literario. Manuel Zapata Olivella fue un médico, antropólogo y escritor colombiano. Su obra sigue viva en la memoria de la Universidad de Cartagena. En Cartagena de Indias, el jueves 30 de enero, en el Centro de Formación de la Cooperación Española, se presentará el libro ‘Manuel Zapata Olivella: Hacia una medicina nacional en el Pacífico colombiano. Estudios críticos y edición genética de la novela La maraca embrujada por jibaná’. Publicada a finales de 2023 por la Universidad de Cartagena, esta obra destaca por descubrir una novela inédita del médico, antropólogo y escritor colombiano. Más que un libro, es una reconstrucción de la memoria que realizaron Silvia Valero y Emiro Santos, investigadores y docentes de la Universidad de Cartagena.

Los autores tenían la certeza de su existencia y la convicción de que el célebre maestro la había dejado a su disposición puesto que ‘La maraca embrujada’ es la antesala, junto a otros títulos, de ‘Changó, el gran putas’ (1983). Silvia Valero asegura que el libro que presenta, junto a Emiro Santos, es “el resultado de una obsesión” que la impulsó a una búsqueda incesante por varios centros de documentación, una aventura que la llevó hasta el archivo de la Universidad de Vanderbilt donde reposaban los manuscritos de Zapata Olivella.
El libro de los investigadores y docentes de la Universidad de Cartagena ofrece al lector una novela que explora “el conflicto entre la medicina científica y los saberes ancestrales afrodescendientes e indígenas en Colombia durante las primeras décadas del siglo XX”. Una convivencia cultural ambientada en Condoto, un pueblo del Pacífico, que responde a una problemática propia de un espacio y tiempo, pero que pueden ser aterrizadas en la actualidad.
Los autores cuentan que la obra de Zapata Olivella narra “cómo un joven médico intenta imponer la medicina occidental como único saber legítimo y se encuentra ante las distintas formas de resistencia y negociación de los pobladores de la región”. El trabajo, más allá de la novela, es el poder de los diálogos, del discurso de la antropología médica a través de estudios críticos sobre lo encontrado en los manuscritos de Zapata Olivella y la reconstrucción de su proceso escritural.
Silvia Valero y Emiro Santos descubren en la obra una propuesta política que trasciende lo cultural y literario, pero que se materializa como un trabajo centrado en el lenguaje, explorando la coexistencia de negros, indígenas y mestizos en un mismo territorio. Un trabajo digno del oficio de escritor y narrador de uno de los representantes más importantes de la cultura afrocolombiana. El trabajo se divide en dos partes. La primera consiste en estudios críticos, organizados en tres capítulos, que sitúan ‘La maraca embrujada por jibaná’ en un plano discursivo. La segunda parte presenta la novela en una edición genética, acompañada de un aparato de notas de génesis, editoriales y explicativas.
En conversación con Facetas, Emiro Santos explica qué es la edición genética y la importancia de rescatar la narrativa de un pensador de nuestro territorio. “Cuando estamos interpretando textos literarios, ellos mismos comienzan a pedir la manera de ser leídos e interpretados. En este caso estábamos trabajando con una serie de manuscritos que no podían leerse en las mismas condiciones y no me refiero a la dificultad solo de la transcripción, o la codificación, sino que no se podía leer como uno lee una novela que ha sido publicada por el autor en vida o un texto que ha sido finalizado y está listo para entregar”, expone el investigador. Silvia Valero y Emiro Santos, docentes e investigadores de la Universidad de Cartagena realizan un análisis crítico de la novela La maraca embrujada por jibaná de Manuel Zapata Olivella. Además, asegura que se encontraban en lo que él llama “un trayecto escritural” con distintos momentos, intentos y versiones de Manuel Zapata Olivella para concretar un proyecto novelístico. Al encontrarse con tres redacciones de la novela, para ellos no era posible estudiarla como un texto acabado o detenido en un único momento del proceso, sino que lo entendieron desde lo creativo, la reflexión, la búsqueda e interrupciones del autor.
“En estos procesos de lectura teníamos que encontrar distintos instrumentos a los que habitualmente usamos para interpretar textos literarios en las experiencias investigativas que hemos tenido y es ahí donde surge la crítica genética que básicamente es el proceso de estudiar manuscritos de autor que no tuvieron como fin una publicación última, sino que son precisamente los movimientos, la indecisión, la interrupción, las variaciones para intentar comprender cómo funciona el laboratorio del escritor a la hora de enfrentarse a sus intereses estéticos, históricos, sociales en el carácter específico de la novela”, explica Santos.
Cuenta que el encontrarse ante esta novela descubrieron uno de los muchos momentos de reflexión narrativa de Zapata Olivella como intelectual y como escritor antropológico.
“Estamos nosotros como coautores e investigadores ante la pregunta que surgió sobre cómo abordar o cómo tratar este tipo de situaciones, de ahí la necesidad de implementar los recursos de la crítica genética”. Lo sorprendente de este proyecto es el trabajo de los investigadores y docentes que no solo llevan a la luz la obra del maestro Zapata Olivella como un regalo para los amantes de su obra y la riqueza literaria del país, sino el análisis de los diálogos que su literatura establece y así entender el mensaje explícito como el oculto. Hablar de las problemáticas de salud pública que enfrenta una sociedad multirracial y tocar temas como el anticolonialismo y la minería. Su análisis y visión lo ubican políticamente.
Seguir generando debates junto a sus estudiantes, en el semillero de investigación de la Facultad de Ciencias Humanas de la Universidad de Cartagena, es el propósito que tienen los docentes para seguir el camino de la investigación que los llevó hasta esta novela. Entendiendo que a través de los grandes pensadores del país se explican contextos y situaciones propias del comportamiento e historia de las personas, y poder, juntos crear nuevas reflexiones ante problemáticas que persisten. La literatura es un camino que responde al hombre y su pensar.
*Comunicadora Social. Periodista