Por: Ec. Esp. Omar Escobar
Lee Kuan Yew, logró durante 1965 a 1990, logró consolidar un modelo político donde para algunos hay una mezcla entre autoritarismo y democracia occidental regido por un partido político hegemónico, que se distancia del modelo político democrático occidental.
Hay que recordar que el modelo democrático occidental supone que a más democracia más crecimiento económico, sin embargo, Singapur demuestra lo contrario, su crecimiento económico no obedece a esa fórmula, pues las restricciones democráticas son tan grandes como su crecimiento económico. Por tanto, cabe preguntarse ¿Cuáles fueron los factores propios del modelo político de Singapur que ayudaron a posicionarse dentro de los 10 países más productivos del mundo?
Lee, sabía que, para hacer crecer una economía, necesitaba: tiempo, autoridad y reformas de fondo por no decir revolución: Tiempo, pues estuvo en el poder por más de 30 años. La autoridad del Estado, reflejada en instituciones firmes, no solo en lo militar y sus normas sino en el cumplimiento de metas aunque derive en restricciones a la opinión pública y la asociación conspirativa contra el gobierno. Para los orientales, por encima de los derechos políticos están los derechos económicos, en occidente los derechos humanos, están por encima de la pobreza. Por último, Singapur hizo una revolución educativa, pese a conservar dudosas costumbres, su sistema educativo se orientó a la formación de profesionales en ciencia y tecnología… si hoy Singapur, es un país donde con pena de muerte, es uno de los menos corruptos del mundo y uno de los más eficientes. Aparte hubo otros elementos como la cultura y la religión basada en el confusionismo, que ha logrado forjar disciplina y carácter, respeto, honradez en el ciudadano medio singapurense.
La economía de Singapur. Tan solo en 1959, Inglaterra, le otorgó el privilegio del autogobierno y fue así como Lee con su partido Acción Popular, fue elegido como primer ministro. Su primera tarea consistió en formar la Junta de Desarrollo Económico y diseñar un programa para hacer frente «pozo negro de la miseria y la degradación» causada por el capitalismo salvaje del gobierno británico. Lee, un oriental formado en Cambridge y con marcados valores asiáticos, ambos influyeron en la naturaleza del plan económico con corte capitalista y con un férreo control estatal, muy parecido al modelo de su vecina China. El plan se baso en la producción industrial con inversión interna y externa, incentivos tributarios, se impulsó básicamente la inversión en salud y educación, creo incentivos para la inversión extranjera,programas de empleo, becas, construcción de viviendas sociales. Sin tener fortaleza en petróleo, se convirtió en uno de los tres mayores refinadores del mundo. Si bien aplicó una política social benefactora, al mismo tiempo un estricto control de la vida privada y la supresión de libertades individuales (incluyendo la detención de opositores sin llevarlos a juicio y la aplicación de castigos corporales). Incluso había órdenes explícitas sobre cómo ser corteses y un sistema en el que la obediencia es una garantía de seguridad social y bienestar, y un elemento central en el engranaje de la educación del país. Con el paso del tiempo, el país impresionó al mundo con sus altos niveles de educación, sanidad y competitividad económica, al tiempo que atacó la corrupción, considerado como un mal endémico en la antigua colonia.
Régimen Político. Singapur ha sido regido por el Partico de Acción Popular -PAP- con 3 ministros y 6 presidentes, siendo así un partido hegemónico donde no se distingue entre partido, gobierno y el Estado. Este partido ha estado presente desde la fundación del Estado, siendo su diseñador y constructor del mismo, con un modelo NO democrático.
El PAP, ha superado sus funciones como partido y ha trascendido al gobierno y al mismo Estado. Por su parte el Gobierno es autoritario gracias al respaldo de las fuerzas policiales y de defensa. Ni Linz y Stepan, especialistas en tipos de gobierno, no lograron clasificar el modelo singapurense, y así como tiene escasos rasgos democráticos, al mismo tiempo es autoritario, por ello es un caso atípico a la teoría de la modernización que asocia el desarrollo económico con modelos abiertos en lo democrático, social y de mercado.
El modelo ha logrado mantenerse gracias a algunas estrategias nacionales e internacionales. En el campo internacional pese a mantener restricciones civiles, USA se ha hecho de oídos sordos pues muchos empresarios estadounidenses tienen inversiones en ese país. Frente a los valores occidentales como la democracia y los derechos humanos, la sociedad asiática contrapone sus propios valores como el trabajo, el ahorro, la estabilidad familiar, la creación de empresa, la honestidad, la disciplina, la educación y la religión, es por ello, que el gobierno se inmiscuye en asuntos de familia y religiosos derivando la figura patriarcal del gobierno. A nivel interno, la legitimidad de su poder se basa en dos aspectos: uno creando una cultura enfocada al beneficio económico individual garantizado y por otra parte la aversión al riesgo e intimidación. El Estado ha patrocinado campañas donde insinúan que cualquier intento de cambio de régimen interrumpiría el desarrollo económico que, acompañado a la aversión al riesgo, se hace posible que tal propaganda alcance su efectividad. El singapurense respecto a las preferencias individuales de costo-beneficio, desestima una transición democrática ya que los beneficios económicos del actual gobierno, superan los costos y la incertidumbre de un cambio hacia la democracia. Cualquiera diría que los singapurenses tendrían una aversión al riesgo y racionalmente es comprensible, pues es mejor la estabilidad económica bajo régimen autoritario que la incertidumbre económica con el sueño de la libertad.
Con el fin de mantener la estabilidad política y preservar el orden, el gobierno ha realizado cuatro reformas constitucionales para permitir mayor participación electoral a los opositores. Por otra parte, el gobierno impone multas y castigos por cualquier tipo de alteración al orden social, así ha logrado evitar el surgimiento de lideres de oposición. Otra de las estrategias es la incorporación de los lideres opositores a los programas del Estado e incentivos financieros, de igual manera lo ha hecho con los sindicatos de trabajadores, logrado limitar la voz de oposición. Todo sindicato u otro tipo de organización, debe estar debidamente registrada pues cuida celosamente las agrupaciones de personas con intenciones políticas, manteniendo registro autorizado de ellas con una estricta supervisión. Así todas ellas como los medios de comunicación tienen fuertes restricciones, no pueden cuestionar ni al partido ni al gobierno so pena de sanciones.
Claves del PAP. El partido PAP desde el Estado, ha trascendido horizontal y verticalmente todas las esferas de la acción humana, sobre todo ha logrado crear exitosamente una cultura hacia lo económico –“economy based values”. Este es un factor de peso para mantenerse en el poder, pues de allí el contrato social se basa en que los individuos pueden renunciar a su soberanía individual toda vez que el Estado garantice el cubrimiento de las necesidades económicas -más que las políticas-.
El PAP, se identifica como un conjunto de individuos lógicos y racionales, sin ideología oficial, pero si con un fuerte pragmatismo y valores asiáticos: eficiente, meritocrático e incorrupto. El pragmatismo se expresa en su enfoque táctico, la racionalidad y los resultados empíricos. Su eslogan: “políticas racionales con propósito” lo que supone una planeación con análisis cuantitativo y táctica al ejecutar, es decir, manejo cuidadoso y prudente de los medios, los directores y la presentación pública de las políticas sobre todo en religión y cultura. Así mismo el gobierno se precia de estar conformado por los “mejores y más brillantes”, muy bien pagados. El principio meritocrático es aplicado en los cargos públicos, educación, fuerzas armadas y empresas estatales y a la vez ha evitado confrontaciones del Estado con grupos étnicos: chinos, malayos, euroasiáticos – disuasión blanda-. El PAP, ha utilizado muy bien los valores asiáticos derivados del confusionismo, que sirven al gobierno, en especial dos: “el objetivo de la sociedad es el orden y la estabilidad” y “el espíritu del comunitarismo”; así combinan y se refuerza el orden con la solidaridad humana; al parecer arremeten contra la debilidad democrática y el individualismo liberal de occidente y toma la disciplina oriental, la autoridad y solidaridad comunal del comunismo… con el divino propósito de fortalecer la dirección de elite y la sumisión de una sociedad bien remunerada y muy beneficiada.
Muchos académicos y estudiosos dicen no poder clasificar la política de Singapur y se refieren como un sistema político NO democrático, talvez influenciados por lenguajes políticos desde la angloesfera. No democrático implica autoritarismo – modo de dominación de clase- si bien permite un pluralismo político, es limitado, pues el líder es quien toma decisiones estratégicas y al que, incluso, se le debe sumisión, pues no reconoce derechos individuales.
Es preciso recordar que todas las formas políticas de dominación, en su concepto como en sus hechos, sufren transformaciones en el tiempo, por tanto, no tendrán las mismas características de antaño, pero persisten los grupos o élites -privilegiadas- dominantes que toman el timón del barco para dirigir una sociedad, es por ello, la confusión de algunos estudiosos. Sin embargo, Singapur habría que sumar a la lista que Wikipedia publica, no como autoritarios, sino como totalitarios: Japón, China, Corea, Líbano, Israel, Siria y Tailandia. Lo cierto es que el autoritarismo, es una herramienta eficaz para poner orden y generar desarrollo, eso lo saben las oligarquías del mundo y la quisieron imitar los movimientos de izquierda.