Ruben Darío Ceballos Mendoza

Por: Rubén Darío Ceballos Mendoza*

La Política, es en argumentación actual, el conjunto de actividades que se asocian con la toma de decisiones en grupo, u otras formas de relaciones de poder entre individuos, como la distribución de recursos o el estatus, también arte, doctrina o práctica referente al gobierno de los Estados, promoviendo la participación ciudadana al poseer la capacidad de distribuir y ejecutar el poder según sea necesario para garantizar el bien común en la sociedad; estriba su importancia en impactar positivamente la calidad de vida de los ciudadanos y, en general, los habitantes del territorio nacional y la competitividad del país, promoviendo la generación de valor público a través de la transformación digital del Estado, de manera proactiva, confiable, articulada y colaborativa entre los grupos de interés, al tiempo de permitir el ejercicio de los derechos de los usuarios del ciberespacio; siendo su objetivo como actividad, resolver pacífica y razonablemente conflictos entre las personas y los grupos humanos, ya que es ella, la política, una forma particular de afrontar aquellos conflictos que deben resolverse democráticamente.

La planificación social, por su parte, es el proceso por el cual los formuladores de políticas (legisladores, organismos gubernamentales, planeadores y, a menudo, financistas) tratan de resolver los problemas de la comunidad o mejorar las condiciones de ésta diseñando e implementando políticas que tengan por objetivo obtener ciertos resultados; y es, sin duda, un medio efectivo de organización, desarrollo comunitario y cambio político, si se inicia con una actitud de familiaridad, sinceridad y franqueza con la comunidad. Como formuladores de políticas o como constructores de una comunidad, seguro que bien podemos convertirla en un proceso incluyente y participativo, en la seguridad que existirán las más de las posibilidades de alcanzar resultados positivos y a largo plazo tanto para los responsables de formular políticas como para la comunidad en general en múltiples aspectos y áreas en su definitivo como duradero beneficio y claro aprovechamiento.

Deben apuntar una y otra, esto es, política y planificación social, a capacitar al más alto nivel académico a todos aquellos profesionales que se desempeñan o que pretenden desempeñarse, directa o indirectamente en el campo de las políticas públicas o privadas en el ámbito de lo social centrada en el logro de sociedades más equitativas e igualitarias, donde empleo, trabajo y educación sean ejes fundamentales para la construcción de ciudadanía, así como enfatizar en la gestión del sector público y de los programas sociales bajo un enfoque de planificación, esto es, construcción y desarrollo sistemático de escenarios futuros como marco de la transformación del presente, en la certeza que el criterio de eficiencia y sus complementarios de eficacia y viabilidad son compatibles con otros criterios asociados a la equidad y a los consensos políticos y democráticos que lleven a desarrollar e implementar propuestas analíticas y propositiva sobre la política social centrada en equidad, igualdad y construcción de ciudadanía; así como constituirla en ámbito excelente de referencia para la formación de recursos humanos del más alto nivel a este tenor, con capacidad de análisis, investigación, reflexión, programación participativa y movilización social, en ruta a conformar espacios propicios para la resignificación moral y política de la relación de las políticas sociales con la economía, en el marco de la consolidación democrática y la defensa de los derechos humanos.

De la misma manera que responder con políticas y propuestas sólidas, consensuadas y viables a los profundos problemas sociales por los que atraviesa la sociedad, en lo que cabe su estudio a fondo y de los instrumentos de gestión social, planificación y programación; inequidad y desigualdades sociales: economía política de la política social; evaluación de proyectos, políticas, actores y movimientos sociales; comunicación y movilización social, Agenda de dicha Política y políticas sociales comparadas; economía social y políticas de generación de empleo y trabajo; derechos humanos y política social; Estado, sociedad civil y políticas de reconocimiento; paradigmas de desarrollo y política social global; políticas de desarrollo local; Política y programación educativa, que en individualidad, conjunto y articulación, nos darán el resultado buscado en positivo contexto de integralidad y cohesión social.

Aunarse debe lo cual, a efecto de hacer completo este significativo y potenciador propósito, con la gestión a tope y prioritaria de proyectos sociales , apuntar a brindar un entrenamiento profesional intensivo a todos aquellos profesionales que se desempeñan o que pretenden desempeñarse, directa o indirectamente en el campo de las políticas públicas o privadas en el ámbito de lo social, a fin que actuar puedan como líderes transformadores, parte de equipos de planificación u operadores en políticas y programas sociales en capacidad de detectar problemas; ayudar para formular, administrar y evaluar proyectos sociales; participar en el diseño de un presupuesto; interactuar con funcionarios de alto rango o de agencias de financiación así como con agentes comunitarios; promover y facilitar el desarrollo de acciones desde la sociedad civil; con lo que se pretende, en definitiva, que cuenten con una sólida formación teórica, metodológica e instrumental pertinente para gestar, movilizar, iniciar, promover y motivar, propuestas públicas y de la sociedad civil en dirección a programar e implementar iniciativas y propuestas tanto de acción como de comunicación social.

Requiere este itinerario para que posible sea en todas sus partes, entender la gestión pública considerando los contextos y nuevas demandas sociales, mismas que lleven a promover preparaciones acorde al vínculo del mercado de trabajo y el deterioro importante de las condiciones sociales, dado el incremento de pobreza, indigencia, desempleo, informalidad y desigualdad de los ingresos, para centrarse en la modernización del Estado y políticas públicas, vinculando con ello, principalmente reducción del gasto, transparencia, digitalización, gobierno abierto y capacitación del servidor público; debiéndose entender igualmente el contexto para la confirmación cívico/política con la economía, la defensa de los derechos humanos y la consolidación democrática, a fin de responder con propuestas sólidas y viables a la congestión social por las que atraviesan hoy nuestras sociedades.

*Rubén Darío Ceballos Mendoza. rubenceballos56@gmail.com – Jurista

¿Cómo le pareció el artículo?
+1
2
+1
0
+1
1
+1
0
+1
0

Por editor

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *