Por Carlos Villota Santacruz*
A menos de seis meses de la primera vuelta presidencial en Colombia, que definirá el sucesor de Iván Duque, un ciudadano de origen nariñense y con fuerte legado en su formación académica e intelectual, ha contribuido con su pluma y su voz a fortalecer la democracia, a través de la Revista “Estado & Política”.
Se trata de Alberto Efraín Ortiz, quien acompañó al ex presidente de la República Carlos Lemos Simonds y el ex Alcalde de Bogotá Julio César Sánchez, a edificar su vida pública con diplomacia y una alta efectividad, traducida a una acción integral en favor de varias generaciones de colombianos.
Es un ciudadano que, desde el sur del país, se ganó a pulso un lugar en la historia de su departamento. Con el paso del tiempo, esa labor de traslado a su proyecto editorial. La Revista Estado & Política con más de un centenar de ediciones, donde los funcionarios públicos en cabeza de los Jefes de Estado, Ministros, Gobernadores Alcaldes, Diputados, Concejales, empresarios y artistas, dejaron testimonio de su trabajo.
En sus páginas se puede echar una mirada al pasado, como la expedición de la Constitución de 1991, la rendición de cuentas de Gobiernos liderados por César Gaviria, Ernesto Samper, Andrés pastrana, Álvaro Uribe, Juan Manuel santos y el actual mandatario Iván Duque. Todo un escenario de conocimiento, que ha trascendido fronteras, en medio de la aparición de las redes sociales, que, en opinión de los jóvenes y personas de la tercera edad, ha elevado la comunicación ciudadano
Quienes lo conocen de cerca, hablan de Alberto Ortiz como un hombre diplomático, de buenas maneras y con una capacidad de liderazgo, que trasciende el terreno público y privado, hasta llegar al escenario del arte, la literatura y una manera diferente, de describir los 32 departamentos de Colombia, en cada calle, cada zona rural y en medio de sus fiestas populares, tiene historias por contar.
Lo mejor, es quienes encarnan están historias son ciudadanos en todos los roles o hombre y mujeres con experiencia en las tres ramas del poder público, de cuyo sector, es un conocedor al detalle, bajo una agudeza en el análisis y en la descripción de los hechos.
Por ejemplo, al preguntarle a Alberto Efraín Ortiz, cuál considera el principal aporte al país de la Constitución de 1991, dijo fue darle vida de una democracia representativa a una democracia participativa y pluralista, donde muchos actores se convirtieron en un instrumento de trasformación y cambio en beneficio de la sociedad colombiana.
En ese examen en la historia, este escritor indica que esta hoja ruta ha estado llena de espinas y contradicciones internas al interior de los partidos políticos. “Caminando las calles de Bogotá, Cali, Popayán o Pasto, se puede comprobar que cada una de las colectividades no han encontrado su vocación de cambio. Hoy, se habla de conversación, frente a las nuevas demandas ciudadanas”.
Alberto Efraín Ortiz
A esta altura de la entrevista, surge otro interrogante: ¿cuál podría ser su contribución en ese proceso? Sin dudarlo, considera que la Revista Estado & Política desde su nacimiento hasta la recta final del año 2021, ha estado comprometida con darle vida a la democracia, la gobernabilidad, la gobernanza el liderazgo desde una óptica política, económica y social.
“Desde nuestro metro cuadrado, hemos actuado y hemos podido influir sobre el Estado y la sociedad en la construcción de políticas de impacto, que han trascendido a mediano y corto plazo, desde la óptica de la óptica de la educación y pedagogía política. En las páginas de la Revista, se ha tejido y un progreso económico y social, sobre todo en departamentos como Cundinamarca, Bolívar, Nariño, Cauca, Putumayo y la misma ciudad de Bogotá, de la que dice, agradece lo que le ha dado, a lo largo de sus más 5 décadas de vida
Un reciente aporte en esta dirección, es la elaboración de un libro del dirigente sindical Julio Roberto Gómez, quien falleció, a finales del año 2020, tras contagiarse de coronavirus –pandemia que aún se encuentra en Colombia-
En palabras de Alberto Efraín Ortíz, quienes abrazan el hermoso milagro de estar vivos, tras la llegada de la pandemia del Covid-19, es contribuir en la construcción de una sociedad incluyente y solidaria.
No puede ser posible –que en departamentos como Nariño exista aún, la presencia de la violencia irracional, degradada e indignante que se traduce en miles de muertos, en centenares de secuestros, violaciones permanentes a los derechos humanos y atentados terroristas contra personas y bienes, masacres y extorsiones, desplazamiento forzado, donde se destruye la misma dignidad de sus habitantes
Para el Director de la Revista Estado & Política Alberto Efraín Ortiz, la llegada de la pandemia del coronavirus, dejó al descubierto la dolora realidad del desempleo y la economía informal, que supera los dos dígitos, de la población económicamente activa.
“Esta realidad, ha generado todo tipo de insatisfacciones, conflictos y limitaciones a miles de profesionales, mujeres cabeza de familia, obreros, campesinos, personas que no están adecuadamente formadas. Por encima de todo, entre este grupo de compatriotas existe desesperación. La pérdida de la autoestima, al no tener los mínimos ingresos de la canasta familiar”, dijo
Finalmente, este colombiano –oriundo del municipio de Aldana en el departamento de Nariño- con experiencia en el servicio público y los medios de comunicación, añade que estamos en presencia de un Estado fortalecido en lo militar y debilitado en lo social. “Es un modelo de sociedad que está perdiendo de forma acelerada la legitimidad., la credibilidad y la gobernabilidad. Los problemas no se solucionan. Lo peor. Es que cada día parecen, más y más problemas. Con fuerza y peligrosidad. Para no ir más lejos, los delitos informáticos”
“Los que queremos un presente y un futuro viable y sostenible en el tiempo, no podemos quedarnos pasivos frente a la crisis económica y social, la violencia generalizada y el debilitamiento del Estado y la corrupción. Ese, es un despeñadero incontrolable e impredecible. Necesitamos una decisión individual y colectiva, para cambiarle la brújula al país, a través de fortalecer la educación. Por ahora, estamos, presenciado un país sin alma y sin corazón”, sentenció Alberto Efraín Ortiz.
*Carlos Villota Santacruz – Twitter villocol