Por: Iván Meneses – Periodista.
Barranquilla se sigue consolidando como la ciudad de Colombia con los avances más notorios en desarrollo urbano y mejoramiento en la calidad de vida de sus habitantes.
Sus altos índices en la calidad de la salud, la educación, “la reducción de la pobreza”, niveles de crecimiento en la construcción, el comercio, entre otros aspectos, explican el elevado optimismo de los barranquilleros en encuestas y estudios de percepción.
En su Plan de Desarrollo, el ex alcalde Alejandro Char, pensó en la ciudad con un ambicioso plan de inversiones en infraestructura y programas de gestión social.
Por la vocación portuaria de Barranquilla, la administración distrital sigue empeñada en que la urbe vuelva a mirar a su fuente de vida, el río Magdalena, diseñando para ello una gran ventana de 5 kilómetros de longitud, entre Siape y la isla La Loma. Allí se construye, en varias etapas, una obra sin antecedentes que comprende un malecón, corredor verde y avenida del río, para facilitar a los barranquilleros el disfrute de su paisaje.
Desde el 18 de julio, enamorarse del río Magdalena mientras se contempla su paisaje, naturaleza y encanto Caribe se ha convertido en el plan perfecto para los barranquilleros y visitantes, quienes disfrutan del Gran Malecón en el sector de Puerta de Oro.
Desde su apertura, el proyecto ha recibido el visto bueno de la ciudadanía, evidenciado en sondeos aplicados dentro del malecón y en redes sociales. El 99% de visitantes dicen estar satisfechos con las instalaciones y un 97% expresan haber sentido felicidad durante la experiencia.
El Gran Malecón sector Puerta de Oro, ubicado en el Centro de Eventos Puerta de Oro, Vía 40 con calle 79B, funciona todos los días de 6 a.m. a 10 p.m.
El proyecto total del Gran Malecón contempla áreas peatonales, grandes zonas verdes, espacios para bicicleta, recreación y deportes. La obra se ejecutó en unidades funcionales, con procesos licitatorios independientes, hasta llegar a La Loma, donde funcionará la nueva sede de la Alcaldía de Barranquilla.
Además, rinde un homenaje a aquellas personas quienes de sol a sol van empujando una carretilla por las calles de la arenosa, ofreciendo sus productos de frutas, verduras y el popular raspao, personalizados en el famoso hombre caimán, a quien también se le rinde homenaje, conocido también como el caimán del rio.