Por: Rubén Darío Ceballos Mendoza*
Seguridad, es la capacidad de dar respuesta efectiva a riesgos, amenazas o vulnerabilidades y estar preparados para prevenirlos, contenerlos y enfrentarlos. Identifica a una situación de ausencia o disminución de riesgos para un determinado entorno social y natural. Confianza, se refiere a poseer un sentido interno y realista de nuestras capacidades. Confiar en uno mismo y en sus capacidades es crucial para gestionar los retos emocionales y alcanzar objetivos en la vida.
Una y otra, llaves de oro para potenciar el turismo, el cual debe crecer tanto integral como urbanamente, ayudar a mejorar la imagen en uno y otro espacio, lograrles identidad local e internacionalmente, tratar esta tan importante y rentable industria desde la determinación, la disciplina, la constancia y el mejoramiento permanente y continuo, articular en su potencialidad lo público y lo privado, romperle los esquemas obsoletos que lo atan y hacerlo más expedito, innovar, introducirle tecnología, inteligencia artificial, vincular a la juventud, impulsar mayormente la educación / arte / cultura, invertir, ser creativos, trabajar con denuedo, emprender, visibilizarnos, reconocernos y hacer que nos reconozcan por lo bueno y mejor, buscar siempre las oportunidades de desarrollo, progreso crecimiento.
Todo tienen nuestros territorios para ser desde las oportunidades una potencia mundial a nivel turístico y para ello deberíamos como país liderar esa posibilidad soportado en las regiones, dotarlas de más frecuencias aéreas, más inversión extranjera directa, proyectos nuevos de hotelería, infraestructura, atraer turismo internacional, promocionarnos a tope, propalar en mejor y mayor forma nuestros recursos y geografía, así como los otros muchos que nos han hecho famosos universalmente hablando, tales como flora, fauna, paramos, folclore, comunidades ancestrales, historia, música, gastronomía, desiertos, selvas, mares, ríos, montañas, artistas, gran talento a todo nivel, biodiversidad y un largo etcétera.
Se trata de tener la visión y claridad suficiente de tener al turismo como una política de Estado, como un sector económico de valor agregado, en la realidad que posee más de cien subsectores económicos y es l turismo de paso el sector económico más humano de todos, por lo que en correspondencia con lo cual importa sobremanera controles máximos y mano dura con los brotes especulativos, que se traduce en que no podemos cohonestar este tipo de abusos, delitos e infracciones; así como ir contra la trata de personas que nos erosiona ay hace que el buen turismo se estanque, ya que daña nuestra imagen, sobre todo por cuanto las redes sociales propalan tales mensajes y los turistas puede ser un buen canal de propaganda o un acérrimo crítico, cuyas falencias contará, por lo que no podemos olvidar el decir que un turista satisfecho trae más turistas.
Interesa en este derrotero de inmenso valor agregado que es el turismo, llenarnos de optimismo, entender que tenemos que querernos, querer a nuestro país y que todo converja para que seamos un territorio más confiable, bonito, bello, seguro, limpio, justo, más equitativo, lo que impone luchar, unirnos y avizorar un potencial y crecimiento inconmensurable con seguridad absoluta.
*Jurista rubenceballos56@gmail.com