Por: Blaicer Moreno Córdoba*

Desde hace siglos se discute y debate sobre la relación que debe existir entre la política y la administración, sobre y en torno a la separación o cercanía que debe existir entre ellas; de ahí que importante sea buscar y encontrar el tipo de relación que se da en las administraciones locales, en particular respecto de las decisiones que se adoptan. Y aunque considero que pueden existir criterios neutrales, interesan las transversalidades, a efecto de intentar reflejar las realidades todas que se registran en el desempeño municipal, en lo que importa e importará siempre tanto lo cualitativo como lo cuantitativo.

Las crisis que sufren las administraciones públicas suponen el replanteamiento de su capacidad para prestar los servicios propios del estado de bienestar desde el punto de vista de la eficacia de la gestión. Si bien esta pérdida de eficacia ha sido uno de los problemas a los que más atención se ha prestado en los últimos años, ponen de manifiesto tales crisis que el modelo tradicional en el que se sustentaban las administraciones públicas no fue el mejor, constituyéndose en el objetivo principal de la comparación de los comportamientos de las élites burocráticas de distintos países.

Importante es también, explicar uno de sus elementos más importantes, como es la relación entre los niveles políticos y los niveles administrativos del sistema, poner en evidencia que las relaciones entre política y administración son mucho más complejas que las definidas por los conceptos de subordinación o autonomía y que dichas relaciones merecen no sólo más atención, sino una distinta de la que se les ha prestado, razón por la que objetivo principal sea analizar el proceso en virtud del cual se ha producido un resurgimiento en el análisis de esta cuestión y cómo los múltiples matices del problema de la relación entre política y administración han abierto nuevas líneas de estudio que, desde los más variados puntos de vista no sólo a nivel municipal, sino departamental, regional y nacional, al quedar abiertas muchos aspectos a los que se les debe buscar respuesta.

Los procesos de cambio político por los atraviesa el mundo actual ponen al descubierto que la búsqueda del equilibrio entre liderazgo político y burocracia no es un problema olvidado, sino asunto que se presenta como uno de los principales problemas a resolver, en la verdad que las democracias se enfrentan a una serie de procesos de modernización de sus administraciones públicas en las que el problema de la relación entre política y administración; o, si se quiere, entre los niveles políticos y los niveles administrativos del sistema, sigue estando al frente de cualquier propuesta de reforma con la que realmente se pretendan afrontar los retos que un Estado prestador de bienes y servicios tiene planteados en la actualidad.

*Blaicer Moreno Córdoba. amerlyng@gmail.com – Administrador de Empresas. Especializado en Proyectos de Desarrollo. Asesor y Consultor Político y Empresarial

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POLÍTICA Y ADMINISTRACIÓN (I) – Blaicer Moreno Córdoba