Periódico El Derecho
Fue este un movimiento que tuvo lugar en la Francia del S XIX y que reunió a un grupo de poetas que promovían un tipo de arte y de estilo de vida totalmente rompedor y fuera de reglas. Son los bohemios franceses, los artistas incomprendidos que veían belleza allá donde nadie la veía y que querían experimentar al máximo con la vida sin importarles la moralidad ni las convenciones sociales.
Este movimiento surgió para denominar a una generación de artistas que protagonizaron una importante revolución estilística totalmente innovadora y de ruptura con lo que se había logrado hasta el momento. Cultivaban un tipo de poesía que emanaba cierto aire gótico y donde existía una actitud fuertemente destructiva. Una poesía cuidada y llena de una belleza siniestra que se separaba ligeramente de la tradición romántica para ofrecer una literatura más oscura, más sugestiva y devastadora. Por su propuesta estilística, fueron incomprendidos entre la sociedad de la época ya que apostaban por un tipo de poesía que estaba totalmente fuera de la razón y de la lógica. Fueron criticados tanto por su poesía como por su personalidad o su manera de vivir ya que se alejaban totalmente de la moral imperante en la sociedad puritana de la época. Rehuyeron de forma voluntaria de la escena pública de la sociedad francesa.
Salieron de la vida «moral» cristiana para introducirse en ese otro mundo oscuro, de vicio y placer, protagonizado por las drogas, el sexo y el juego. Y este es el marco donde se crearon muchos de sus poemas, algo que no podía ser bien acogido por la Francia del Romanticismo. El nombre de esta generación viene de la publicación de Paul Verlaine, «Los poetas malditos», un ensayo en el que el autor hablaba sobre el tipo de vida y literatura que llevaron a cabo 6 poetas (él incluido), un camino que les llevó a tener una vida «maldita», es decir, una vida llena de tormentos e incomprensión. Con el tiempo, el término acuñado por Verlaine, fue generalizado y, hoy en día, denominamos «malditismo» a una condición artística que apunta a aquellos creadores que salen de la norma pautada y que se alejan de la sociedad. Los artistas rebeldes e incomprendidos. Intentaron con su poesía, captar las verdades de la vida mediante el uso de métodos indirectos como figuras retóricas (metáforas y otras). Su temática recae en lo melancólico, lo malo, lo terrorífico y la rebeldía. Sin duda fueron un símbolo francés.
Algunos de los autores más destacados de esta generación, que cultivaron buena poesía y literatura aunque no se siguieran los moldes sociales estipulados por la sociedad más aristocrática. Los poetas malditos franceses que más marcaron en la historia de la literatura universal son: Charles Pierre Baudelaire (1821-1867). Baudelaire ha sido uno de los poetas malditos más conocidos a nivel internacional. Escribió una gran cantidad de escritos de géneros tan variados como el ensayo, la crítica artística, etcétera, pero su gran talento se hallaba en la poesía. Siempre tuvo una personalidad rebelde y formaba parte de los círculos bohemios de la Francia del momento. Su influencia en el mundo de las letras despunta por el exquisito uso del simbolismo y, de hecho, su obra causó un gran cambio en el simbolismo francés promoviendo una nueva manera de hacer poesía. Las Flores del Mal es una de sus grandes obras poéticas y este poemario es considerado como un poemario «moderno» y que tiene una gran influencia de la estética de Edgar Allan Poe.
Jean Nicolas Arthur Rimbaud (1854 –1891). Otro de los poetas malditos más importantes de la Francia del XIX fue Rimbaud. Su cambio de actitud y de forma de vida vino cuando abandonó el confort de Europa para viajar hasta África y descubrir otras maneras de vivir. Esta experiencia marcó un antes y un después en su carrera literaria haciendo que cultivara un tipo de poesía con una visión muy extravagante y personal. Para Rimbaud, un buen artista tenía que desafiar sus sentidos y darles la vuelta para ver realmente la auténtica cara del mundo.
Paul-Marie Verlaine (1844 – 1896). Este es uno de los poetas más destacados de la poesía francesa porque con su aportación consiguió crear una nueva manera de elaborar poesía. Tuvo una vida muy convulsa y que estuvo totalmente marcada por las desgracias y las malas decisiones. El movimiento decadentista es el que mejor encaja con este autor que cuenta con una biografía sorprendente entre la que destacamos un hecho insólito: disparó a su amigo Rimbaud en la muñeca y, por ello, fue encarcelado. Su periodo en prisión le marcaría profundamente en su vida y terminó sus días convirtiéndose al cristianismo y profesando la fe.
Stéphane Mallarmé (1842 – 1898). Mallarmé también trabajó como crítico tanto artístico como literario, al igual que hizo Baudelaire. Sin embargo, también destacó dentro del mundo de la poesía creando poemas simbolistas que consiguieron una excelencia sin igual. De hecho, se considera que con Mallarmé se consiguió llegar al clímax del simbolismo literario y su obra fue la precedente a que aparecieran las vanguardias literarias. Influenciado por Baudelaire, este autor consiguió crear obras con una gran cantidad de detalles y en las que había un gran deseo de libertad creadora.
Tristan Corbière. El autor más desconocido del grupo. Únicamente escribió un libro pero sus letras están cargadas de «malditisimo» y de un tono sarcástico y muy potente. Su obra apareció como una sátira de la sociedad francesa de la que no se sentía formar parte.
Las características de estilo más destacadas de los poetas malditos, además de su actitud rebelde hacia la vida, que se salían del circuito artístico comercial y reconocido, el tipo de poesía que cultivaban también cumplía con algunos rasgos distintivos como los siguientes: Sentimiento pesimista: Sus textos están plagados de una visión pesimista de la vida ya que no se sienten aceptados ni comprendidos en una realidad de la que están muy desvinculados. Textos oscuros: El tono y el ambiente que se recrean en sus poemas siempre están bañados de un tono oscuro y misterioso. Quieren reflejar esa otra manera de vivir que se sale de la moralidad impuesta por la sociedad cristiana de la época. Ideología liberal: En sus poemas también hay una fuerte huella de la mentalidad liberal ya que estos poetas promulgaban por una vida mucho más libre, sin tantos prejuicios moralistas. Actitud de rebeldía: No aceptaron la realidad de la que formaban parte y, por eso, su actitud fue rebelarse contra ella. Belleza alternativa: Frente a los tópicos de belleza más clásicos y convencionales, estos poetas veían belleza en otros muchos más planos de la vida, incluso en la muerte. En la oscuridad, en las lágrimas, en la noche… La belleza de lo oscuro y lo diferente es un gran signo del malditismo. Poesía metafísica: Buscaban un significado diferente a la vida, por ello, sus composiciones tienen un aire más trascendental y que tenían como objetivo conocer el misterio de la vida. Arquitectos del lenguaje: Cuidaban sobremanera el lenguaje que usaban en su poesía. De las figuras retóricas que más empleaban destacamos la metáfora y el simbolismo.