Diego Otero Prada
Bogotá, 23 de marzo de 2024
El viernes 22 de marzo tuvo lugar la asamblea ordinaria de Ecopetrol en las instalaciones de Corferias en Bogotá.
Participé como accionista minoritario y tuve varias intervenciones. Con respecto a la nueva junta directiva manifesté lo siguiente.
- Soy partidario de una junta directiva integrada por personas competentes en temas de energía, que tengan un criterio nacionalista y de defensa de los intereses naciones, que no estén influidos por, las teorías eurocentristas que no corresponden a nuestra realidad.
- La integración de los miembros de la junta directiva debería ser objeto de una consulta democrática, no una decisión a dedo como ha sido la historia, algo que es antidemocrático.
- Tengo mis dudas sobre varios candidatos:
a. No veo que hace una sicóloga en una junta tan importante en la cual se discuten asuntos de gran complejidad técnica y económica.
b. No veo claro nombrar una ambientalista enemiga de los hidrocarburos y del fracking en una empresa petrolera.
c. No acepto candidatos con conflictos de interés y con vínculos con un personaje que deja mucho que desear, candidatos que forman parte, a parecer, de la junta directiva de la empresa de este señor en explotaciones de gas natural. No hay incompatibilidades legales, pero hay motivos éticos para que no formen parte de una empresa estatal.
Además, son candidatos que vienen de las clases altas colombianas.
d. Apoyo la participación de un obrero o empleado, pero con la condición de que sea empleado o trabajador actual de Ecopetrol, y que sea elegido por votación entre todo el personal de la empresa, tal como ha sido práctica en Alemania, Francia, Suecia y otros países.
Defiendo una reforma laboral que incluyera este punto, es decir, que en todas empresas estatales y en las privadas con más de 500 000 empleados exista representación en las juntas directivas de un vocero de los empleados y trabajadores escogido por el voto popular de estos. Esto sí sería revolucionario.
e. No tengo nada contra el exsindicalista William Palma, pero no es actualmente funcionario de Ecopetrol y fue escogido a dedo por el presidente Petro, lo que no es democrático.
El candidato Palma puede tener todas las condiciones para integrar la junta directiva, pero no es un trabajador de Ecopetrol, y no puede decirse que representa a los actuales trabajadores de la empresa y, además, fue escogido a dedo.
POR ESTAS RAZONES ESTUVE EN CONTRA DE LA ELECCIÓN DE ESTA NUEVA JUNTA DIRECTIVA, PERO DADO QUE EL GOBIERNO NACIONAL TIENE EL 88% ACCIONES FUE APROBADA.