Por: Saúl Alfonso Herrera Henríquez*

Respecto de las acciones decididas que se requieren para generar cambios y transformaciones tanto positivas como significativas que señale en artículo anterior referidas a -alcanzar estabilidad económica y -aprovechar la revolución digital, están las de -buscar un desarrollo más ecológico y sostenible e -invertir en las personas.

En cuanto a -buscar un desarrollo más ecológico y sostenible, importa que se busquen para todos acercamientos internacionales, orientados a que la comunidad de naciones asuma el firme compromiso de desacelerar el aumento de los niveles de carbono en la atmósfera y reducir los impactos climáticos en los sectores más vulnerables, en lo que ayuda frenar la instalación de nuevas plantas alimentadas a carbón, desmantelar las existentes y sustituirlas por fuentes de electricidad limpias y apoyar a que se logre una transición justa, lo que incluye proteger a los trabajadores afectados, transición cada vez más factible dado que las innovaciones tecnológicas reducen el costo de la energía limpia, debiéndose en consecuencia centrar los esfuerzos en las transiciones que generen mayor impacto.

Es momento de revitalizar las reformas que a menudo quedan estancadas, resolver las ineficiencias subyacentes para lograr energías limpias y asequibles, en lo que son necesarias competencias en la generación y distribución de las mismas, así como organismos reguladores verdaderamente independientes. De otra parte, concierne atender el transporte como fuente significativa de emisiones; más cuando se prevé un incremento de urbanización en los que infraestructura y diseño de los territorios marcan una diferencia enorme; por lo que interesa que en lugar de grandes urbes en que los habitantes pasan horas viajando para llegar a sus empleos, lo que obliga que los gobiernos impulsen el desarrollo de comunidades más compactas con sistemas de transporte público eficientes y no contaminantes. Por otro Lado, en las iniciativas referidas al cambio climático, tanto de mitigación como de adaptación, y en las de desarrollo en general, deber es priorizar y dirigir esfuerzos para lograr el mayor impacto posible por cada peso gastado y buscar soluciones que puedan ampliarse rápidamente.

En relación a -invertir en las personas, es de entender que las crisis muestran que, a fin de preparar a los países para conmociones futuras, es primordial desarrollar sistemas sólidos y eficaces a todo nivel, fortalecer los sistemas de educación y salud, en lo que no basta brindar recursos presupuestarios de manera eficiente y priorizada, sino también alinear los incentivos de los docentes y los proveedores de atención públicos y privados respecto de las necesidades de las personas, siendo igualmente fundamental encontrar soluciones más amplias para mejorar la atención en salud y elevar la calidad de la educación, incluso a través del aprendizaje a distancia.

La acumulación de capital humano es más importante en los territorios mayormente afectados por conflictos que en cualquier otro sitio, pues es allí donde vive la mayoría de los pobres hoy por hoy, atender adecuadamente a los migrantes, brindar en manera esencial la seguridad es sustancial, ganar la batalla del desarrollo soportados en victorias ganadas en los uno y más de nuestros hogares a lo largo del tiempo, en la afirmación que es en las familias y comunidades donde se construye la aceptación necesaria para que las mujeres puedan trabajar fuera del hogar, para que todos los niños reciban educación y para que se reconozcan las contribuciones de todos, lo que implica mucho más que inculcarles habilidades; significa fomentar la autosuficiencia y estimular aspiraciones, lo que va en interés de todos, ya que produce lo cual enormes beneficios económicos para los territorios en vías de desarrollo, incluidos los más frágiles y afectados por conflictos.

*Abogado. Columnista. Especializado en Gestión Pública. Derecho Administrativo y Contractual. Magister en Derecho Público. saulherrera.h@gmail.com

TEMA ENLAZADO: GENERAR CAMBIOS SIGNIFICATIVOS (I)