Periódico El Derecho
Educación, es la formación destinada a desarrollar la capacidad intelectual, moral y afectiva de las personas de acuerdo con la cultura y las normas de convivencia de la sociedad a la que pertenecen, como también transmisión de conocimientos a una persona para que esta adquiera una determinada formación. Ciencia, es la rama del saber humano constituida por el conjunto de conocimientos objetivos y verificables sobre una materia determinada; es el conjunto de técnicas y métodos que se utilizan para alcanzar tal conocimiento. Cultura, es aquella definida como un multiverso simbólico, compuesto de ideas, valores y emociones, contenido en la conciencia y en la comunicación, incrustado en el modo de vida, y orientado hacia la virtud o perfectibilidad humana, con el que los miembros de un grupo social experimentan y construyen los significados y sentidos de su vida.
Deben ser Educación, ciencia y cultura en nosotros y entre nosotros, sustento de civilidad, ya que parecería que la ignorancia generalizada les conviene a los detentadores del poder, quienes, en lugar de combatir sus rezagos, lo profundiza de manera consciente y consecuente. Saben a ciencia y conciencia que un pueblo sin acceso a la educación, la ciencia y la cultura, es presa más que fácil de demagogos, manipuladores, populistas, dictadores y tiranos, pues se les puede conducir e inducir a pensar que los problemas son culpa del pasado y no de la incapacidad del presente, que las carencias son porque así lo quiere Dios y que la violencia es producto del neoliberalismo, entre otras argucias que presentan.
Se dedican a cambio de construir, a destruir con ímpetu y energía las ya de por sí frágiles bases de educación, ciencia y cultura que tenemos, razón por la que los recursos mejores que a tales tareas deben asignarse, vayan a parar a todo cuanto no se requieren de manera importante y en lugar reconocer el rezago que en ella tenemos y de adelantar más y mejores programas en estas asignaturas, vale decir, actuar en consecuencia, decidieron irse por lo fácil, esto es, no hacer nada edificante al respecto. / IVA