Iván Bohórquez Zapata

Por: Iván Bohórquez Zapata*

ESTADO, PAÍS, DEMOCRACIA

El Estado es un concepto político referido a una forma de organización social, que cuenta con instituciones soberanas, que regulan la vida de una cierta comunidad de individuos en el marco de un territorio nacional; país, es una comunidad social con una organización política común y un territorio y órganos de gobierno propios que es soberana e independiente políticamente de otras comunidades; y, cultura democrática, es una construcción continua de toda la sociedad, es la actitud de la ciudadanía frente al sistema político, la confianza que deposita en las instituciones, las creencias y valores de cómo funciona o debería funcionar un gobierno. La celebración de las elecciones en sí misma, no asegura la estabilidad de la democracia, para ello se requiere participación de la ciudadanía en forma responsable, informándose, reflexionando sobre las causas de la realidad que le afecta a su vida, su familia y la comunidad.

Sobre la base de las consideraciones antecedentes, tarea de todos debe ser siempre contribuir a mejorar seguridad, convivencia ciudadana, seguridad integral, paz, tener sentido de Estado, visión de país y cultura democrática de manera valiente, con sentido común, sin hipérboles ni mentiras, toda vez que tenemos que ir encaminados tras situaciones distintas para tratar de resolver lo que no lo está en contexto de soluciones con fundamento en el diálogo y la concertación, siendo importante sobremanera, para los más de los efectos, forzar siempre el diálogo institucional y político en democracia.

Como ciudadanos importa defender convicciones con humildad, tener altura de miras, actuar sobre bases firmes y no de oídas, insistir en las mejores conductas, protegernos de los desórdenes públicos agravados, dejar actuar en todo su esplendor el Estado de Derecho sin cortapisas. Con una política seria es dable avanzar. No podemos bajo punto de vista alguno seguir instalados en el resentimiento, ni en las provocaciones, sino ir por caminos de concordia y reconciliación tras los cambios, transformaciones y regeneraciones que de manera importante y urgente necesitamos y han sido reivindicaciones aplazadas, razones por las que no podemos permitirnos desviaciones, por mínimas que estas sean.

Es el momento, lo creo firmemente, de potenciar la dignidad de nuestras instituciones democráticas, siendo el mejor vehículo para lograrlo, la democracia misma, en lo que importa el apoyo de todos, para reconstruir con él la relación del ciudadano con el servidor público y restablecer la confianza en nuestras instituciones políticas. Estamos hartos ya de tanta violencia, presente en todos los rincones patrios y porque debemos recurrir a las nuevas y modernas formas de hacer política, en lo que es definitivo dar el ejemplo de trabajar en paz y de buena fe, así como hacerla accesible, alcanzable, cercana, verdadera y que traduzca las demandas de la población con las decisiones y soluciones más importantes para su integral desarrollo y social bienestar.

*Iván Bohórquez Zapata. ibozap@yahoo.es Administrador Público. Especializado en Gerencia de Proyectos de Desarrollo. @ivnBohorquez1

¿Cómo le pareció el artículo?
+1
0
+1
0
+1
0
+1
0
+1
0

Por editor

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *