Rodrigo Uprimny Yepez- abogado

Por: Rodrigo Uprimny Yepez*

Mi propósito es invitar al lector a aproximarse directamente a este pensador, por lo cual no he intentado resumir sus planteamientos morales y jurídicos, una tarea imposible en una columna.

En abril de este año se celebraron los 300 años del nacimiento de Immanuel Kant, que muchos expertos consideran el filósofo más importante de la modernidad. Sin embargo, muchas personas (tal vez la inmensa mayoría) no lo conocen, y quienes han oído de él tienden a verlo como un autor aburrido, difícil y poco relevante para sus vidas, por lo cual no valdría la pena enredarse en sus escritos. Incluso en mi querida Universidad Nacional hay algunos grafitis mentándole la madre a Kant y a sus seguidores.

Por mi admiración a este pensador, y debido a la influencia que han tenido en mi algunos de sus planteamientos, intento combatir esa impresión. Concedo que Kant no es la mejor pluma, que algunos de sus libros son difíciles y contienen expresiones que hoy vemos como racistas y sexistas. Sin embargo, sostengo que Kant sigue siendo relevante para cualquier persona y que algunas de sus tesis y de sus escritos son de fácil comprensión e incluso bellos, agradables y prácticos. Esta columna es una invitación a que le pierdan la aversión y exploren algunas de sus tesis y de sus textos.

Comienzo por delimitar a cuál Kant me refiero pues, siguiendo sus propios planteamientos, la filosofía debe responder a tres grandes preguntas: i) ¿qué puedo conocer?; ii) ¿qué debo hacer?; y iii) ¿qué puedo esperar? La respuesta a cada una de ellas corresponde a las tres grandes partes de su obra: su teoría del conocimiento, su filosofía moral y del derecho, y su visión teleológica o finalista acerca de la condición humana.

Estos tres componentes forman un todo coherente, pero son separables. Una persona se puede adherir a la filosofía moral de Kant sin aceptar su epistemología y viceversa. Y aunque su teoría del conocimiento sigue siendo pertinente, por su esfuerzo monumental de armonizar racionalismo y empirismo, creo que el Kant relevante para el ciudadano de a pie es el filósofo de la moral y del derecho.

Mi propósito es invitar al lector a aproximarse directamente a este pensador, por lo cual no he intentado resumir sus planteamientos morales y jurídicos, una tarea imposible en una columna He optado por otra vía: me centro en su texto ¿Qué es la Ilustración?, que no sólo expresa una parte esencial de su visión filosófica, sino que, además, es un ensayo corto y no desprovisto de cierta belleza: podría ser, junto con otro bello opúsculo, como La paz perpetua, un buen texto de iniciación.

Kant reitera en este escrito su defensa robusta de la autonomía individual, que asocia a nuestra capacidad de tener un entendimiento y pensamiento propios sin estar sometido al de otros. La Ilustración consiste precisamente en salir de la minoría de edad, de la cual somos culpables, porque por pereza o cobardía dependemos del pensamiento de otros: “¡Ten valor de servirte de tu propio entendimiento! He aquí la divisa de la ilustración”.

Este uso propio de la razón no es un ejercicio aislado y para beneficio individual, sino que el filósofo de Königsberg lo asocia a un uso público de la razón, esto es, en forma abierta y en diálogo con los otros, porque la razón es común a todos los seres humanos y por eso podemos conversar y entendernos. Kant robustece y aclara esa tesis con sus “máximas del común entendimiento humano”, que formula en forma tripartita: uno debe i) pensar por sí mismo, ii) pensar poniéndose también en el lugar de los otros y iii) pensar siempre en concordancia consigo mismo. Debemos entonces ser autónomos en nuestro pensamiento, pero ser igualmente consecuentes y capaces de comprender las perspectivas ajenas.

Estas tesis muestran (espero) a un Kant asequible, práctico y aún relevante a sus 300 años: ¿no es acaso clave defender hoy el pensamiento autónomo, consecuente y en diálogo con los otros, en este mundo cada vez más dominado por redes sociales y algoritmos que mutilan nuestra autonomía y nos dividen en tribus cerradas enfrentadas unas a otras? 

*Abogado. Director de Dejusticia

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