Por: Carlos Flórez Sarmiento*
Nos indica seguridad ausencia de peligro o riesgo. Sensación de total confianza que se tiene en algo o alguien. Capacidad de dar respuesta efectiva a riesgos, amenazas o vulnerabilidades y estar preparados para prevenirlos, contenerlos y enfrentarlos, al igual que identifica a una situación de ausencia o disminución de riesgos para un determinado entorno social, natural, y consiste en hacer que se reduzca a niveles aceptables, debido a que el riesgo es inherente a cualquier actividad y nunca puede ser eliminado. Protección en tanto, es la acción de proteger o impedir que una persona o una cosa reciba daño o que llegue hasta ella algo que lo produzca. También, todas aquellas actividades dirigidas a garantizar el pleno respeto de los derechos de todas las personas sin discriminación, de conformidad con los regímenes existentes en materia de derecho.
Independientemente de cualquier circunstancia, requerimos los colombianos todos, ante la cada vez más creciente inseguridad que día a día en carne propia soportamos y padecemos, una verdadera política de seguridad, donde defensa y convivencia ciudadana sean protagonistas de primer orden, en contexto de grandes ambiciones en estas materias, en la verdad que hoy más que nunca tiene una importancia suprema para el país político y nacional, el gobierno, la ciudadanía y comunidad en general, a ver si bajo tales parámetros alcanzamos, ojalá de una vez por todas, unas unidades territoriales en paz, toda vez que de alcanzarse la convivencia, hermanada a una superior cohesión social, muchos y más aspectos y consideraciones quedarán fundamentados y traducidos en un todo obligado de seguridad y octaviana paz.
Se impone de la misma manera, agresivas campañas de prevención, protección y autoprotección en cabeza de una fuerza pública apoyada al máximo, motivada, impulsada, moralizada, a efecto que realice, como nos consta, ha hecho y demostrado históricamente está, todos los acercamientos que posibles sean con las comunidades, buscando de ella su empoderamiento en cuanto concierne a la seguridad tanto personal, como barrial, local, municipal, regional y nacional, lo que debe ser una estrategia donde evidente sea el compromiso de los gobernantes todos del país, en la certeza que tendremos una seguridad a toda prueba en progreso permanente y continuo.
En esto deben tomarse sin aplazamientos, decididamente, con voluntad política, decisión y ejecución, cartas en el asunto, a fin de evitar que sigamos como sucediendo está, a merced de la delincuencia de distinto origen, naturaleza y propósito. Se trata de avanzar, rodearnos de personas con trayectoria, conocimientos, demostrada experticia, y comprometidas al máximo en la búsqueda y procura de una seguridad cierta en beneficio ciudadano y comunitario, lo que requiere de recursos materiales, económicos y humanos suficientes que permitan y además faciliten diseñar tácticas, estrategias, métodos, planes, proyectos y programas que lleguen a personas y entorno familiar, social, comunal, laboral y educativo.
Una sociedad organizada, dirigida y acompañada por las autoridades será siempre autosuficiente, ya que colaborará, apoyará, impulsará, fomentará, y se solidarizará, al tiempo que generará comunicaciones fluidas y servirá como canal permanente de información con autoridades, Fuerza Pública y entornos comunitarios cercanos en beneficio de clara convivencia poblacional, lo que debe ser una tarea de siempre, sostenible y sustentable en el tiempo, a efecto de garantizar la defensa de los colombianos frente a todo asomo de perturbación de la tranquilidad, la libertad, el orden y la convivencia pacífica.
Para que lo cuál sea, importan avances pedagógicos que hagan posible que se detecte y combata la inseguridad en cada rincón por parte la ciudadanía, líderes comunales y demás otras organizaciones a este tenor, en ruta a una importante consolidación, en lo que ayudarán adecuadas motivaciones a personas, gestores y promotores sociales, culturales y demás otros, lo mismo que programas muchos de capacitación y formación, en la convicción que más pronto que después caminaremos en civilizada paz.
*Carlos Flórez Sarmiento.Abogado. Especializado en Derecho Administrativo. Magister en Seguridad. Ex Edil de Usaquén. Candidato al Concejo de Bogotá
