Por: Ec. Esp. Omar Escobar
Los primeros envíos de cocaína desde Colombia a USA, se remontan hacia la década de los 60, y se vendía a US$8.000 dólares el kilogramo. En esa época, se gesta la mafia colombiana del narcotráfico, antes dominado por los sicilianos, francés y norteamericanos, que obtenía una rentabilidad aproximada del 50% en un periodo de 15 a 30 días. También fue el momento preciso para el crecimiento del mercado de las drogas estadounidense dado el contexto de la contracultura, los movimientos pacifistas, el hipismo, y el auge de la sociedad de consumo que absorbe gente de todo los estratos sociales… los “cuerpos de paz” de la Alianza para el Progreso del 61 difundieron en el sur, la contracultura de la adicción a los estimulantes y las técnicas de cultivo del cannabis.
En cuanto al contexto colombiano, aparte del monocultivo bajo el latifundio, los subsidios para incentivar la exportación de esmeraldas, terminó con prácticas de sobrefacturación para el lavado de dólares, con ello, los capitales golondrina, la especulación financiera entre 1975 y 1980 y la baja cotización del dólar, llevaron a dinamizar el mercado del narcotráfico.
El mercado internacional de cocaína es muy sensible a las restricciones y a la persecución policial, dada la figura de “contrabando”, es así como en 1980, el kilogramo de cocaína en Colombia llegó a $1.750.000 y en 1983 bajo a $500.000. Ya en 1984, el precio por kilo de la pasta de coca era de US$600 y US$1.800 el kilo de base de cocaína… mientras en USA, el kilo se vendía a US$100.000. A raíz de la “persecución” las mafias se organizan militarmente y logran uniones estratégicas hasta con agentes del Estado para proteger las rutas y evitar la baja en precio.
En los años 80, se calcula que USA importó de 9.000 a 10.000 millones de dólares anuales, de los cuales, US$4.500 millones de dólares correspondían para Colombia por concepto de comercialización (rutas), pues la producción de cultivos estaba entre Bolivia y Perú. Bolivia pasó de producir 35.000 TN en 1980 a 104.000 TN de hoja en 1983, que le generaba unos US$2.500 millones de dólares anuales. Igual con Perú que pasó de 20.000 TN en 1974 a 50.000 TN en 1983, con unos ingresos aproximados en US$2.500 millones de dólares. Como se puede observar, la tendencia es creciente, como en Colombia.
Producción y Crecimiento.
A nivel de Latinoamérica, para el año 2019, la Oficina de Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito – UNODC (2020) estimó que el potencial de producción de hoja de coca era de aproximadamente 993.107 toneladas métricas. A nivel de Colombia la producción de cocaína es constante y creciente, según, cifras del Programa Mundial de Monitoreo de Cultivos Ilícitos – UNODC, y del Observatorio de Drogas en Colombia.
Como se puede observar, casi en 30 años, la producción de cocaína ha crecido un 1470%, la base de coca un 98% y el área de cultivo un 257%, y los ingresos que para 1990 estaban en 5.000 millones de dólares, ahora muchos expertos y hasta el gobierno nacional estiman entre un 2,5% al 5% o (19000 millones de dólares) del PIB. Cifras en crecimiento constante pese al gasto desmesurado que cada gobierno ejecuta…aplico ese calificativo dado que las políticas para controlar el narcotráfico son ineficientes… como el famoso, Plan Colombia, suscrito entre Colombia y USA en 1999, cuyos objetivos se enfocaban a reducir los cultivos de coca y terminar grupos armados de izquierda… de acuerdo a la evaluación de sus resultados, hay dos posiciones, una “servil” y otra objetiva:
A) Para el DNP, en la evaluación del periodo 1999-2005, dice: “El Plan Colombia alcanzó una reducción del 50% de los cultivos de coca en Colombia, se fortaleció la economía colombiana a tal punto que el crecimiento llegó a un nivel suficiente para acabar con las economías ilícitas generadas por el narcotráfico y las organizaciones terroristas, redundando en mayor gobernabilidad y una democracia consolidada”.
B) Para el Comité del Hemisferio Occidental de la Cámara de Representantes de EEUU, que en 2017 designó una Comisión externa para realizar una evaluación sobre las políticas antinarcóticas de EEUU en la región, concluye que el Plan Colombia, solo logró la terminación de la contrainsurgencia… pero que fracasó en uno de sus objetivos centrales: controlar la producción y tráfico de coca.
EE.UU., ha gastado 11.600 millones de dólares en dos décadas tratando de eliminar el tráfico y la producción. El país sigue siendo el principal productor de coca en el mundo y con niveles muy similares a los que existían en el año 2000 y la violencia sigue afectando a los más vulnerables. Resaltan como en el 2020 se han registrado más masacres que durante cualquier otro año desde la firma del acuerdo de paz…
Según Shannon Oneil
La Comisión insiste que ni siquiera con grandes campañas de fumigación aérea se ha podido controlar el problema, pues tanto la oferta como el valor de la droga en las calles de Estados Unidos, se ha mantenido estable a lo largo de todos estos años.