Por: Blaicer Moreno Córdoba*
Es la Política, aquella que se ocupa de asuntos públicos que atañen a lo social, cultural y económico, al tiempo que se refiere a lo concerniente a la relación entre los Estados, o a la concepción misma del liderazgo de los mismos y se puede definir como el arte y la doctrina de las formas de gobierno de los Estados, o sea, de la toma de decisiones, efectuadas por sus instancias administrativas o de liderazgo, o bien por participación directa de los representados. También es un sinónimo de las ciencias políticas: la disciplina científica que estudia las formas y dinámicas de gobierno. Normalmente, se refiere al oficio de la conducción del Estado o a la pugna por el control del mismo, por parte de los actores interesados, importa decir, por los sectores que desean ejercer su influencia en las decisiones tomadas respecto al bien común. Dichos actores políticos pueden ser partidos políticos, sindicatos, asociaciones civiles o grupos de ciudadanos, entre otros.
Es lo social, aquello perteneciente o relativo a la sociedad. Recordemos que se entiende por sociedad al conjunto de individuos que comparten una misma cultura y que interactúan entre sí para conformar una comunidad. Es igualmente el Conjunto de características propias de cada individuo que le facilitan la interacción a nivel interpersonal con otros miembros de la comunidad, entre ellas la cortesía y la empatía.
La política social es el conjunto de decisiones políticas, técnicas de gestión, instrumentos y medidas, de agentes públicos y privados, que tienen por objeto el acceso generalizado de la población a niveles de vida y bienestar integralmente adecuados, especialmente de los grupos más desfavorecidos, procurando que los beneficios del desarrollo alcancen a todas las capas de la sociedad con la mayor equidad.
En las sociedades complejas, la política social se define como toda institución y actor de la escena social que, en un marco de Estado que asegura todas las garantías liberales-democráticas, se sensibiliza en la función difusa de evitar la pobreza, marginación y desviación; distribuye de forma equitativa las oportunidades de vida y realiza estas funciones con el mayor grado de auto-responsabilidad.
El elemento definitorio de las políticas sociales es que, siendo el resultado de sucesivas opciones de los poderes públicos, condicionadas por factores tan coyunturales como el momento político, económico, cultural y social en el que se adoptan, éstas se estructuran en torno a derechos sociales, procurando su satisfacción.
Así, no toda política pública que afecta de un modo u otro a la sociedad es una política social, sino sólo aquella que constituye el desarrollo de un derecho considerado social y que se caracterizan: porque su finalidad es la satisfacción de necesidades básicas; son derechos de prestación que exigen, para su efectividad, una actuación concreta de los poderes públicos y otorga a sus titulares el derecho a exigir de los poderes públicos una actuación positiva, que permita el ejercicio efectivo del derecho; son derechos relativos que responden a las necesidades básicas de cada uno de los diferentes grupos poblacionales; son derechos basados en la solidaridad comunitaria (véase principio de solidaridad) y funcionan como mecanismo de integración y cohesión social; son derechos de titularidad individual y son derechos tendencialmente universales: los derechos sociales no son derechos “de clase” sino de todos los individuos.
*Blaicer Moreno Córdoba. amerlyng@gmail.com – Administrador de Empresas. Especializado en Proyectos de Desarrollo. Asesor y Consultor Político y Empresarial