Por: José Guillermo Claros Penna*
Avance, desarrollo, progreso, proyección, perspectiva, planeación, planificación, prospectiva, estrategia, pertenencia, mejoramiento permanente y continuo, pertinencia y demás otros haceres y acciones indicativos de impulsos y potenciaciones, es a lo que siempre debemos acudir, a efecto de evitar caer en mentitas y fracasos, si en verdad y realidad deseamos y queremos un departamento y una ciudad capital asomada definitivamente a escenarios de integrales adelantos a tono con el mundo de hoy, que en contexto de glocalidad así lo exige en claro beneficio y aprovechamiento colectivo.
Como caqueteños obligados estamos a trabajar mancomunadamente en una sociedad ajena a polarizaciones y confrontaciones, las más de las veces. las cuales, por no decir que siempre, insulsas e improductivas que a nada positivo conducen en detrimento de las mejoras requeridas y necesarias en nuestras unidades territoriales para potenciarnos como debería y tendría que ser. Tenemos que pensar en grande. Aupar gestión. Sabernos participantes activos en todo cuanto trasunta administración pública y la progresión en materia democrática, planteamiento que merece y merecerá ser escuchado y su consenso obedecido.
Nos da paso lo cual, además de todo, a un creciente empoderamiento de la cosa pública, controlarnos desde reales oteros con veedurías ciertas en nuestros municipios que oficien como cumbre de moral y eticidad, que junto con otros elementos y actividades ayudemos, de merecerlo, a las administraciones, camino a la implantación e implementación de inteligentes, adecuadas y coherentes políticas públicas que lleven a hacer posible lo necesario.
Tenemos que ocuparnos por los problemas mayores que nos afectan, tal como salud, educación, pobreza, infraestructura, crecimiento, en lo que ayudan responsabilidad, compromiso, cumplimiento, y no caer en el siempre altísimo y oneroso costo que para el erario representan “obras insignia” que terminan por convertirse en exóticos elefantes blancos, que se quedan en fallidas inauguraciones, en proceso de construcción o sin operar, y que casi siempre sirven para enriquecer en forma grosera a los “zopilotes” del poder, sin que se les combata frontalmente, lo que alimenta una intocada corrupción que, se fortalece cada día y cada vez más con una fortalecida impunidad, entre lo que se debe tener en exacta cuenta desarrollo de infraestructura, cuidado del medio ambiente, salud, educación, consolidación de relaciones a nivel nacional y otros sectores y ámbitos de acción propios de la administración , para que al final de la misma no se exhiban los fracaso de una gestión gubernamental. Eso no es lo que queremos para Florencia, Caquetá y sus municipios. Avanzar debe ser para todos tarea y consigna.
*Profesional en Ciencias Militares. Administrador de Empresas. Abogado. Master en Derecho Público. Candidato a Doctor en Derecho.