Por: José Manuel Herrera Villa*
Quiero en estas líneas abordar, así sea en manera breve, las relaciones de condicionamiento, determinación, influencia, incidencia e impacto que existe entre las finanzas como ciencia, como tecnología aplicada y el desarrollo social, pasando apenas brevemente por el devenir histórico de las finanzas desde que se presenta como una función de la contabilidad, hasta su surgimiento como ciencia en el decenio del 50 del S XX.
Lo científico-técnico, proceso que ha tenido lugar durante siglos, ha implicado que, en los últimos años, la ciencia y la tecnología se hayan establecido como factores indiscutibles de desarrollo, de modo que se encuentran en la base de una serie de transformaciones que se difunden por el mundo aceleradamente hasta convertirse en elementos de poder en las relaciones internacionales, lo que ha contribuido al estrechamiento de su relación con la sociedad, siendo evidente a todo faro que el desarrollo científico-técnico puede amenazar la supervivencia humana, pues ha provocado, entre otras situaciones, el deterioro del medioambiente, el recrudecimiento en cierta medida de las calamidades del subdesarrollo, el agotamiento de los recursos energéticos y se ha utilizado y manejado con fines no pacíficos e inhumanos.
Constituyen actualmente ciencia y tecnología un poderoso pilar del desarrollo cultural, social, económico y, en general, de la vida en la sociedad moderna. Tanta es su influencia, que todos los ámbitos se han visto permeados por un creciente alud de productos procedentes de diversas esferas, cuya utilización sistemática se ha impuesto como condición para el desarrollo.
Empresarialmente hablando, tenemos que decir que el desarrollo de las finanzas como ciencia implicó la ocurrencia de cambios en la administración financiera, en un mundo que se vinculó estrechamente con los requerimientos del registro y análisis sistemático de las operaciones derivadas de la complejidad de las actividades comerciales, el surgimiento del proceso de industrialización y la internacionalización de las empresas, centrándose inicialmente en las decisiones administrativas de la elección de activos y pasivos que maximizaran el valor de la empresa, hasta que el análisis comenzó a incluir la inflación y su influencia en las decisiones de negocios, en la desregularización de las instituciones financieras, en el avance tecnológico para la actividad financiera y la importancia de los mercados globales y en la operación de negocios.
Por ello, debía ser cada vez más utilizada no solo como una vía para conocer el resultado de las operaciones realizadas, sino también como un instrumento de vital importancia para la toma de decisiones, lo que fue creando la necesidad de comenzar a vincular las finanzas con técnicas que permitieran desarrollar la administración financiera empresarial y gubernamental con éxito.
El análisis del impacto que tienen las finanzas en la economía y en la sociedad no puede realizarse al margen del papel que juegan en ello la ciencia y la tecnología ya que, como procesos sociales profundamente marcados por la civilización donde han crecido, requieren una estimación cuidadosa de sus fuerzas motrices e impactos y un conocimiento profundo de sus interrelaciones con la sociedad.
Atendiendo a lo dicho, importa como objetivo analizar las relaciones de condicionamiento, determinación, influencia, incidencia e impacto que existen entre las finanzas como ciencia, como tecnología aplicada y el desarrollo social, lo que permite concluir que estudiar el devenir histórico de la administración financiera facilita comprender cómo se fue desarrollando lo cual en directa correspondencia con las necesidades sociales de cada momento, su evolución desde el estudio descriptivo de su primera época, las teorías normativas y los análisis rigurosos actuales. Otro aspecto es que, con el surgimiento de la administración financiera, las finanzas dejaron de ser un campo relacionado fundamentalmente con la obtención de fondos, para abarcar la administración de activos, la asignación de capital y la valuación de empresas en un mercado global.
Ahora bien, entre la ciencia y la técnica y entre esta última y la producción median factores económicos, políticos, sociales e ideológicos decisivos, por lo que las ciencias y las tecnologías son procesos sociales interconectados, que establecen relaciones de condicionamiento, determinación, influencia, incidencia e impacto con la economía, la política, la ideología, la moral, el derecho, la cultura, la psicología social, la religión; y, que la administración financiera no es neutral y puede producir un impacto positivo o negativo según su aplicación, por lo que no todo lo científica y técnicamente posible es social y éticamente conveniente
De lo expuesto podemos inferir que los peligros, riesgos y desafíos radican no solo en el uso del saber, sino también en el saber mismo, de manera que no bastan las buenas intenciones para contrarrestarlos, sino actuar en consecuencia de conformidad con las circunstancias y atendiendo proyecciones, prospectivas y estrategias.
*Profesional en Administración y Finanzas. Especializado en Auditoría Integral. Proyectos de Desarrollo.