Por: Fabio Becerra Ruiz*
Nadie puede desconocer la importancia de la radio como medio de comunicación, de entretenimiento, de cultura, y de desarrollo de los pueblos, y muchos añoran en Colombia la radio de antaño con sus destacadas voces noticiosas, el periodismo ágil y hecho con grandes esfuerzos, y la inmediatez que la caracterizó como una de las más adelantadas de habla hispana.
Pero para quien esto escribe, que pertenecí a la radio de los años sesenta, y setentas especialmente, que compartí labores con ejecutivos como Luis Betancourt Tolosa, quien de portero en la emisora Nueva Granada matriz de RCN, llegó a Presidente de la propia cadena RCN, de Ricardo Alarcón Gaviria, quizá el mejor ejecutivo de radio y TV de los últimos 40 años, y a quien en su brillante trayectoria profesional solamente le faltaría ser Ministro de Estado, que alterné con compañeros de estupendas voces radiales, como Juan Clímaco Arbeláez, quien murió de un infarto leyendo noticias en la BBC de Londres, Hugo Alberto Muncker recientemente fallecido y magnifica voz noticiosa de la Deutshe Welle o «La Voz de Alemania», Juan Harvey Caycedo, en mi opinión, la más versátil y estupenda voz de habla hispana, así como Gustavo Niño Mendoza, quien se paseó por todas las cadenas radiales y la TV, leyendo noticias con su estupendo timbre de voz, así como también alterné con los vigentes Víctor Manuel Salamanca, con Jesús «Chucho» Alzate Arroyo, Fernando Calderón España, David Cañón Cortés, Edgar Oviedo Sandoval, Juan Helmuth Larrahondo Cardona, y mi querido y recordado amigo Alberto Piedrahíta Pacheco, quien me apodó cariñosamente «profesor» Becerra como aún me llaman mis amistades y excompañeros de esas lejanas épocas, y laboré leyendo cuartillas de periodistas de la talla de un Alberto Acosta Penagos, indiscutidamente el más importante periodista de Colombia en su época tanto en radio, como en prensa y TV, y de quien tuve el honor de ser su voz oficial, de un Maestro como Fabio Rincón Tamayo hoy retirado en Villeta, de Orlando Cadavid Correa, de Octavio Quintero, Alfonso Castellanos, Manuel Prado Mejía, Alfonso Morillo Ricaurte, Héctor Rincón, Oscar Domínguez Giraldo, Byron Valencia, y Gabriel Ortiz entre otros, con quienes logré la experiencia que me permite afirmar que para mi gusto muy personal, en radio no todo tiempo pasado fué el mejor que la radio que hoy se practica, y me explico.
La sociedad y el mundo van cambiando aceleradamente, y tanto el país como la radio, se han ido transformando, en especial la llamada “radio hablada”, pues mientras anteriormente se apreciaba la lectura sobria de noticias, que a mi entender era un estilo clásico, elegante, y sobrio, de hace 30 años, estilo ya desaparecido hoy día, y que yo mismo ejercí como locutor titular de noticias de Radiosucesos RCN, Radio Noticias Caracol, y otros medios, hoy es más agradable la radio informal de Julio Sánchez Cristo en la W radio, también de Gustavo Gómez Córdoba en Caracol radio, o de Luis Guillermo Troya en la radio digital, para solo citar algunos ejemplos, de quienes se lucen con un estilo fresco, informal, más ameno y variado, que en mi opinión, llega más al público oyente, y da mayor participación a los periodistas, y también más información con variedad e informalidad al oyente.
Discrepo abiertamente de quienes han propuesto que los “veteranos” vuelvan a hacer radio, pues cada generación corresponde a su tiempo, y el de nosotros los llamados «veteranos», nos pasó hace bastantes años, igual que lamento cómo “figuras” del micrófono o del periodismo, retirados en muchos casos obligadamente por el paso de los años a sus “cuarteles de invierno”, siguen a pesar de todo “levitando” de glorias o épocas pasadas, y se niegan a aceptar la realidad de que por ejemplo la profesión de locutor de noticias, desapareció hace muchos años, y que el hombre o mujer que quiera destacarse en radio hoy día, tiene que ser un muy buen periodista, excelente entrevistador, magnífico reportero, buen redactor e improvisador, además de tener una buena voz y dicción, cualidades que en mi opinión le sobran a los atrás mencionados, Julio Sánchez Cristo, el más original, creador del «estilo radial Sánchez Cristo» y sin duda el más importante periodista de habla hispana hoy por hoy, además de el de mayor sensibilidad social con su exitoso programa «Soluciones W», Gustavo Gómez Córdoba, en Colombia el periodista más versátil y completo en todos los campos, y quien ha salido triunfador en los retos profesionales que ha enfrentado, y Luis Guillermo Troya, quien es ejemplo de perseverancia y esfuerzo personal, con su propia empresa «Troya Noticias», adecuada a los nuevos medios digitales en que se moverá el periodismo del futuro.
No excluiré de éste modesto pero sincero escrito, el mencionar la importancia de la radio como motor del desarrollo del país, pues por ejemplo, colaboré como empleado de planta, con Radio Sutatenza, que con sus poderosos transmisores de 300 kilovatios en AM desde Bogotá y de 100 kw en Medellín, Cali, Barranquilla y otras ciudades, impactó en su época con la educación del campesinado y sus enseñanzas por radio, con sus programas que cubrían con programación y horarios diferentes el mundo entero en ondas cortas, y que fueron ejemplo de alfabetización para muchos países, labor reconocida por todos los gobiernos colombianos, y por serias organizaciones internacionales, que destacaron a Monseñor José Joaquín Salcedo como el más importante radiodifusor de su tiempo en habla hispana, y también participé en el bachillerato por radio programa de alfabetización de la Presidencia de la República, donde llamado por esa leyenda del micrófono que fué Don Fernando Gutiérrez Riaño, de quien recuerdo las «pilatunas» que le hice debido a mi juventud, y con quien alterné en las clases del bachillerato por radio, junto con los recordados amigos Vicente Cortés Almeida, y Ernesto Rojas Ochoa entre otros, y hace poco meses tuve la grata sorpresa de saludar en Miami a la abogada Ana Gladys Salinas, quien fué mi alumna en las clases por radio, y quien en reportaje para el periodista German Posada en Montreal Canadá, contó que seguía las clases de dicho programa de alfabetización por la Radio Nacional, y es ella hoy día, toda una institución jurídica en asuntos de inmigración, y una muy conocida personalidad de la colonia colombiana en esa ciudad de La Florida.
Sea ésta la ocasión, para expresar un homenaje de admiración y respeto, a algunos titanes de la radio en Colombia, quienes son realmente MAESTROS, por su trayectoria profesional, y que en mi modesta opinión incluyen, en el periodismo, al veterano y muy respetado Antonio Pardo García «Premio CPB a toda una vida», al Maestro de Maestros Yamid Amat, quien sigue vigente, vital, recursivo, inteligente, y sin competencia como entrevistador, y de quien sus reportajes en «El Tiempo» y el noticiero de TV CM&, deberían ser materia de estudio en las facultades de comunicación del país, frente al micrófono en radio y TV al recordado y famoso amigo y maestro Jorge Antonio Vega, al economista Álvaro Uribe González, quizá la voz comercial más solicitada en la historia de la radio en Colombia, y a quien el país lo recuerda identificando «aquí y en todas partes, Radio SantaFe», y lo evocamos con su voz promocionando a Caracol en radio y TV y sus cientos de comerciales, que se daba el lujo de cobrarlos con sus propias tarifas, a Gloria Cecilia Gómez, una de las más bellas y premiadas voces radiales del país, hoy retirada y viviendo en Medellín, y en la parte ejecutiva, a los recordados maestros Bernardo «Benny» Tobón Martínez, sencillísimo en su trato, nervio y cerebro de la entonces poderosa cadena Todelar de Colombia, y a Ricardo Alarcón Gaviria Expresidente de Caracol Radio y del Canal Caracol TV, entre otras altas posiciones que ha ocupado, y quizá el ejecutivo radial más importante en los últimos 40 años, a quien sólo le falta en su palmarés ser Ministro de Estado, todos ellos verdaderas «leyendas vivas» de la radio y la televisión de Colombia.
Mención especial también me merecen, personajes como Rafael Serrano Prada, excongresista, empresario radial, y director del diario «El Frente» de Bucaramanga, Fernando Calderón España, vigente ahora desde su querida tierra Huilense, vital como escritor, periodista, politólogo, próximo a publicar su segunda novela, y desde varios años atrás voz institucional del informativo de TV CM&, Eduardo Hernández Vega incansable y activo desde hace más de 50 años diariamente frente al micrófono desde Emisoras ABC de Barranquilla, Edgar Hozzman, quien, sin olvidar su querida Colombia, comenta los hechos de farándula y el mundo artístico, desde New Hampshire USA, más actualizado que si viviera en Colombia, Florentino Mesa quien regresó a su Colombia querida de USA donde cumplió brillante trayectoria en radio y TV, y ahora hace radio desde Ibagué para nuestro país y el exterior, Ximena Mejia, dinámica ejecutiva, y Gerente de RCN Boyacá, permanente impulsora del progreso de Duitama donde reside, conocedora del medio radial, y querendona de «la tierrita Boyacense», Oscar «trapito» Restrepo Pérez, magnífico comentarista de ciclismo, cuya inexplicable ausencia de ESPN, abrió un hueco tan notorio en dicho canal, que fué barrido totalmente por la competencia, en la transmisión reciente de las grandes pruebas del pedal en el mundo, Juanito Romero, magnifico presentador de TV, excelente voz radial y una auténtica «biblioteca con zapatos» como historiador del movimiento artístico en Colombia, también desde Armenia, Melkin Buitrago, haciendo cultura con su estupendo programa «Bitácora de Vuelo» desde la Emisora Cultural de Pereira 97.7 FM, Norberto Patarroyo Director, nervio, y cerebro del portal «El Muro» con su trabajo desinteresado de largos años en defensa del periodismo, y su capacidad de convocatoria al encuentro anual de periodistas, que sin recursos pero con tesón y entusiasmo, organiza anualmente, y que se cumplirá el próximo sábado en Lula Shot, calle 84 14 A 04 de Bogotá, Luis Hernando Hernández Márquez, excelente voz de noticias, periodista Ex-RCN y otros medios, hoy destacado abogado de la Defensoría del Pueblo, y litigante de mucho prestigio en Tunja, José Ricardo Bautista Pamplona, experimentado periodista, excepcional músico, aplaudido compositor, jurado de los famosos premios Grammy, Doctor «Honoris Causa» de la famosa National University de USA, acérrimo defensor de la música colombiana, y además presentador del importante Festival del Mono Núñez en Ginebra (Valle) y de los más destacados eventos de música folclórica en Colombia, Juan Téllez, difusor del folclore y las costumbres campesinas desde la radio y la televisión local de Vélez Santander, Gustavo Núñez Valero, con sus magníficas crónicas e historias de viaje e interesantes reportajes en «Boyacá 7 días», y «el Yayo» Eduardo Aristizábal Peláez, pionero del comentario deportivo en Colombia, nacido en la bella Manizales, pero nacionalizado en Medellín donde reside, excelente abogado especializado, litigante de mucho prestigio, Presidente del Club de Prensa de Manizales, y Director-propietario de sus propios medios en prensa, radio y TV, como el periódico «El Observador», además de columnista permanente y colaborador de «El Muro de Pata», y de diversos portales, y por supuesto merecen mención y unánime aplauso, los populares Armando «el chupo» Plata Camacho, actual Presidente de la ACL, entidad que renació bajo su orientación, la más destacada y estupenda voz colombiana en el exterior, innovador, vital, y creativo, quien en dupla con ése brillante ejecutivo, empresario radial, y recordado narrador deportivo que es William Vinazco Ch. se lucen con ideas espectaculares, proyectos, y realizaciones interesantes, como la actual exposición de «Radio Reliquias», que congrega capacitados conferencistas invitados, en la sede de la Asociación Colombiana de Locutores y comunicadores ACL, Cra. 19B #83-26 de Bogotá, con exhibición de objetos radiales únicos y de museo, tal como lo están haciendo hasta diciembre próximo.
Todos estos personajes, día a día se afianzan como grandes figuras de los medios hablados, y aunque las voces radiales y actividades periodísticas son como lo expreso en éste escrito cuestiones de gusto y apreciación absolutamente personal de cada oyente, todos son exponentes de una inigualable sencillez y calidad humana, que caracteriza a los grandes de cualquier actividad, sin desconocer que aparte de Bogotá, en el resto del país hay también maravillosas voces, magníficos periodistas, y ejecutivos de radio, que quizá incluso superen en calidad profesional a los acá mencionados, pero que no han tenido el cubrimiento nacional que Bogotá expande a todo el país en todas las actividades humanas.
Solo me resta expresar públicamente, mi pesar por no haber compartido labores jamás, durante mi paso por la radio y la TV, con «el Benny» Bernardo Tobón Martínez, uno de los grandes de la radio colombiana, con el exgobernador Gustavo Álvarez Gardeazabal, el más importante escritor vivo de Colombia, y uno de los más destacados de habla hispana, y con Antonio Pardo García, admirado y respetado por las viejas y nuevas generaciones del periodismo colombiano. Felicitaciones en todo caso para todos, y larga vida, para satisfacción del país y de quienes los admiramos y aplaudimos.
*Locutor. Periodista. Profesional de la Radio
